Fuente: El Comercio |
Parecía imposible de creer en el Rod Laver Arena luego de más de 2 horas y cuarto de partido en la final femnina, la alemana Angelique Kerber rompía todo pronóstico y venció a Serena Williams, que se quedó a puertas de igualar el record de 22 títulos de Grand Slam de Steffi Graff.
Las dos jugadoras se enfrentaron por primera vez en primera ronda del US Open del 2007, donde venció en ese tiempo Serena por 6-3 7-5, siendo la última el 2014 en la final de Stanford donde también ganó la norteamericana por 7-6(1) y 6-3. La serie iba 5-1 a favor de la estadounidense y favorita para vencer a la alemana.
EL CAMINO HACIA LA FINAL:
La alemana, tras retirarse del torneo de Sydney, llegó al Australian Open a enfrentar a Misaki Doi en un partido duro por 6-7(4) 7-6(6) 6-3. Un partido que tuvo en dos sets, doble tiebreak. Luego en cuartos venció a Vika Azarenka, y en semifinales a la británica Johanna Konta con un set por lo menos ganado por 7-5.
Serena vino sin preparación al Abierto de Australia, siendo su última participación en el US Open del 2015, venciendo en primera ronda a Camila Giorgi por 6-4 7-5, y en semifinales a la polaca Agniezka Radwanska sorprendió al ganar el primer set de manera asombrosa por 6-0 para acabar el segundo set por 6-4.
EL ENCUENTRO:
Angelique Kerber llegaba sin ser favorita en esta final sobre una gran Serena Williams, supo templar los nervios en su primera final de un Grand Slam ante una Serena a la que de nuevo le traicionó la presión, al igual que en su última derrota, en la semifinal del US Open venciendo el primer set en 39' por 6-4.
Para el segundo, Serena reaccionó y logró alargar el partido tras vencer por 6-3, pero aún así la alemana no se rindió y terminó mostrando un buen tenis en el último set y venció a la estadounidense por 6-4. Tras esta victoria, se convierte en la primera alemana en vencer un título de Grand Slam en el siglo XXI, y el primero desde la última victoria de Steffi Graff desde 1999.
Diego Du Pont (@diegumdupont)